La imagen de Miguel Ángel Poblete o Karole Románov se ha convertido en un ícono de la cultura popular chilena.
En la literatura su historia ha sido retratada en el libro de crónicas de Pedro Lemebel, Loco afán: crónicas de sidario (1996), en uno de los episodios de la novela El tarambana (2011) de Yosa Vidal, en el cuento de Simón Soto «Tocaré con mi mano sagrada sus cabezas» (parte del volumen Cielo negro, 2011) y en la novela Ruido (2012) de Álvaro Bisama.
Inspiró también las obras de teatro Miguel, un ángel para Chile (2009) de la compañía teatral El Cielo,y M. A. héroe de Peñablanca (2013) de la compañía La Sany la película La pasión de Michelangelo (2013) dirigida por Esteban Larraín.